lunes, 1 de diciembre de 2014

Guia de comunicación básica


Guia del sistema educativo Gallego


Alumnado con altas capacidades

Se considera alumnado con sobredotación intelectual cuando muestra las siguientes características: una capacidad intelectual muy superior a la esperada para su edad, una alta creatividad y un alto grado de motivación y perseverancia.



Así, de las personas talentosas se afirma que muestran habilidades excepcionales en áreas muy concretas, por lo que se caracterizan por su competencia específica.

De las personas precoces destacan los aprendizajes tempranos, ya que manifiestan una competencia específica prematura, de las que decimos que son un prodigio, señalamos que consiguen productos inimaginables y destacados para su edad.

Alumnado con discapacidad intelectual

La consideración de discapacidad intelectual requiere de la coexistencia de tres criterios relacionados entre sí: la existencia de un funcionamiento intelectual significativamente inferior a la media, la presencia de dificultades en dos o más habilidades adaptativas y que se manifieste antes de los 18 años.



El funcionamiento intelectual hace referencia a un nivel de inteligencia inferior al medio.
Al hablar de habilidades adaptativas, se hace referencia a la eficacia de las personas para adaptarse y satisfacer las exigencias de su medio. Estas habilidades deben ser relevantes para la edad de que se trate, de tal manera que la ausencia de ellas supongan un handicap.
Con respeto al referido a la edad, el normal es que una discapacidade intelectual significativa se detecte ya en edades temperás. En relación con esto, hace falta comentar también que la discapacidade intelectual pode darse sola o junto con otras discapacidades o síndromes.

Por último, respeto de su origen, hace falta decir que esta pode ser muy diversa.

Alumnado con discapacidad motora

Las discapacidades motoras abarcan un grupo de alteraciones del aparato motor (huesos, articulaciones, músculos o sistema nervioso implicado en la regulación de la movilidad), debidas a diferentes causas, en grados y formas variables y que de manera transitoria o permanente suponen alguna limitación o imposibilidad funcional para una persona.



Junto con las disfunciones propias del aparato motor, pueden presentarse algunos trastornos asociados (alteraciones sensoriales, trastornos neurológicos, dificultades en la percepción, alteraciones del lenguaje, dificultades cognitivas y de atención, alteraciones emocionales y socio-afectivas...).

Alumnado con discapacidad visual

Se considera que una persona presenta deficiencia en su capacidad de visión cuando tiene una perdida o disfunción en una estructura o función psicológica, fisiológica o anatómica que disminuye por lo menos un tercio su capacidad visual para desarrollar actividades propias de una persona sin discapacidad, en situación análoga de edad, sexo, formación, capacitación social, familiar y localidad geográfica.

Alumnado con problemas de conducta

   Se entiende que una alumna o un alumno presenta necesidades educativas especiales por un trastorno grave de conducta cuando presenta alteraciones mentales, emocionales o del comportamiento que, por su intensidad, frecuencia y duración, limitan su desarrollo educativo, su capacidad de ajuste y adaptación, así como al hecho de enfrentar y resolver situaciones cotidianas.

   

   Se consideran trastornos de conducta, entre otros, al trastorno por déficit de atención con hiperactividad, a los comportamientos negativistas desafiantes, al trastorno disocial, a la violencia entre iguales y los trastornos de ansiedad.

Alumnado con trastornos generalizados del desarrollo

Utilizar el término “trastornos generalizados del desarrollo” (TGD) supone la referencia a un variado grupo de trastornos de origen neurobiológica que aparecen en los primeros años de la vida y que afectan a las capacidades de relación, comunicación e imaginación.

Alumnado con dificultades específicas de aprendizaje

Se considera que una alumna o un alumno presenta dificultades específicas de aprendizaje cuando  su rendimiento en relación a la adquisición y uso de una o varias de las capacidades de: comprensión y expresión oral, lectura, escritura, razonamiento y cálculo matemático es significativamente discrepante con su potencial de aprendizajePara más información os dejo la guia publicada por la xunta sobre el tema.

Audición y Lenguaje


Discapacidades Motóricas


La atención educativa hospitalaria y domiciliaria en Galicia

La atención educativa hospitalaria y/o domiciliaria tendrán por finalidad la continuidad del proceso formativo del alumnado que curse enseñanzas de régimen general en modalidad presencial en centros sostenidos con fondos públicos y que, por prescrición facultativa, debido a enfermedad o lesión, no pueda asistir con regularidad al centro por un período prolongado de tiempo. En todo caso, se priorizará la atención al alumnado de las etapas de enseñanza obrigatoria.



Será destinatario de atención educativa hospitalaria el alumnado que deba permanecer ingresado en un centro hospitalario, a tiempo completo o en hospitalización de día, en alguna de las siguientes situaciones:
a) Larga hospitalización: más de treinta días.
b) Media hospitalización: entre quince y treinta días.
c) Corta hospitalización: menos de quince días.
El alumnado de larga y media hospitalización será quien reciba atención educativa en coordinación con el centro de origen, mientras que lo de corta hospitalización podrá realizar en el centro hospitalario actividades educativas de carácter general.

Será destinatario de atención educativa domiciliaria el alumnado escolarizado en centros sostenidos con fondos públicos que deba permanecer convaleciente en el domicilio por un período de tiempo superior a un mes. Igual, será objeto de esta atención el alumnado que padezca alguna enfermedad crónica que sea la causa de faltas de asistencia al centro de seis o más días continuados al mes dentro de un período mínimo de seis meses.

Discapacidades Sensoriales


Sobredotación intelectual


Pruebas para valorar el nivel de competencia curricular


En la siguiente imagen del “Grupo Ambezar” podrás acceder a las Pruebas para valorar el Nivel de Competencia Curricular en las materias de Lengua y Matemáticas de todos los cursos de Infantil, Primaria y de 1º y 2º de la ESO.



Ambezar es el nombre elegido por un grupo de trabajo formado por profesionales del entorno educativo que se ocupa de generar herramientas o recursos para la intervención educativa desde la perspectiva de la orientación, fundamentalmente en el ámbito de atención a la diversidad.


Atención á diversidade

Para transmitirlles a nosa filosofía de traballo deixámoslles este fermoso vídeo no que se abarca a Atención á Diversidade. Disfruten del.

Convivencia


Estimadas familias, alumnado e docentes, gustaríanos convidarvos a reflexionar xuntos a cerca dun termo amplo ó que cada quén de nós contribúe diariamente. Para iso referenciamos este pequeno vídeo ó que titulamos CONVIVENCIA. Parecenos que, despois de velo, podemos reflexionar e analizar un concepto complexo como é o citado, pero tamén analizar a importancia que ten a atención á diversidade dentro da construción do mesmo. Que vos parece?

La Navidad se acerca… ¿Cúales son los regalos idóneos para los niños?

Las fiestas de Navidad son muy especiales para los niños gracias a la llegada de personajes mágicos como Papá Noel o los Reyes Magos, además de los regalos, las reuniones familiares, el tener dos semanas de vacaciones con tiempo para el descanso y la diversión, hacen que esas épocas sean especiales para los pequeños de la casa.
Cuando llegan las fechas los niños empiezan a escribir la cara a los Reyes Magos y piden multitud de juguetes y, debido a la influencia de la publicidad, es frecuente que pidan juguetes que no son adecuados para ellos. Nuestro papel como padres pasa por dialogar con ellos para que pidan juguetes que además de ser de su agrado cumplan una función lúdica y educativa.

A la hora de seleccionar los juguetes intentaremos que estos sean:
. Divertidos y educativos
. Elegidos en función de las preferencias del niño y de su edad, no de las preferencias de quien lo regala
. Seguros- que cumplan la normativa CE que sean sólidos, seguros, asépticos y duraderos.
. Que permitan desarrollar capacidades específicas de los niños como el movimiento, el lenguaje, la creatividad, la memoria, razonamiento lógico y espacial…
. Evitar juguetes que fomenten comportamientos agresivos, sexistas o intolerantes.
. Elegir aquellos que favorezcan aspectos positivos del niño o la niña y que favorezcan el juego compartido con padres, hermanos y amigos
. Si el niño tiene mucha ilusión por un regalo recordar que con frecuencia se agotan y es recomendable que al menos uno de los que traigan los Reyes Magos o Papá Noel se ajuste a la petición de los menores.
. Los juguetes más adecuados en función de la edad y del nivel de desarrollo:
Desde el nacimiento hasta los 6 meses:
Los juguetes deben estimular todas las áreas relacionadas con “sus sentidos” (ver, oír, tocar, “chupar”), ya que es a través de ellos como conocen el mundo que les rodea. Con estas actividades inician la relación con los objetos, etapa fundamental en su desarrollo.
Juguetes que cumplen los requisitos anteriores son:
– Sonajeros, manoplas y calcetines con sonido / Carruseles musicales / Peluches con sonido / Móviles de cuna / Mordedores / Muñecos de goma / Cadena de muñecos ensartados en una goma que se sujetan a la silla de paseo.
De los 6 a los 12 meses:
El niño comienza a sentarse, gatear e incluso empieza a ponerse de pie con ayuda y algunos incluso dan sus primeros pasos. En estos meses, predomina el área de movimiento
– Andadores / Pequeño gimnasio de actividades / Alfombra de actividades / Pelotas sonoras o luminosas / Pelotas pequeñas blandas / Peonzas grandes / Juguetes suaves (tela o peluche) que se desplazan, emiten sonidos, luces… / Juguetes de plástico para la hora del baño / Muñecas de trapo / – Encajables grandes (por ejemplo, series de cubos de distintos tamaños que encajan unos en otros y sirven también para apilarse, o pirámides de anillas).
De los 12 meses a los 2 años:
– Correpasillos / Arrastres / Tableros de actividades / Pelotas / Pequeñas sillitas / Encajables grandes para comenzar a hacer pequeñas construcciones / Juguetes para encajar figuras / Cubos y palas / Juguetes para el baño / Platos y cucharas de plástico / Teléfono de juguete / – Coches, camiones / Muñecos y peluches / Juguetes suaves (tela y peluche) que se desplazan, emiten sonidos, luces / Libro de imágenes simples en cartón duro o tejidos plastificados / Cuentos con texturas y sonidos.
De los 2 a los 4 años:
– Correpasillos, triciclos, bicicleta con ruedines, coches de pedales/ -Carretilla / Cubo, pala y rastrillo / – Cochecito de muñecas/ – Juguetes de imitación de la vida diaria batería de cocina, médicos, banco de carpintero / Construcciones y encajes de formas sencillas / Rompecabezas de piezas grandes / Juguetes con códigos de colores (llaves grandes de colores que abren la puerta del mismo color) / asociaciones sencillas (colores y formas) / Juguetes más complejos, con personajes, etc. donde ellos puedan comenzar a imaginar y crear sus propias historias / Libros de imágenes grandes / Cuentos interactivos donde deban apretar algún botón cuando aparece un dibujo, etc. / Cassette con micrófono / Grabaciones de canciones y cuentos / Juguetes para emitir sonidos como tambores, guitarras, etc. / Peluches/muñecos con sonido, canciones./ Muñecas con vestidos / accesorios para jugar con las muñecas / – Títeres/Desarrollo artístico plastilina / Lápices de colores / Pintura de dedos / Pizarra.
De los 4 a los 6años:
– Bicicleta con ruedines y accesorios, patinetes / diana con pelotas pequeñas con velcro / juego de tenis con pelota sujeta a una goma y otros juegos de deportes adaptados / disfraces / pinturas de maquillaje / juguetes de oficios y actividades de adultos: cajas de herramientas, de enfermera, médico, etc./ accesorios deportivos: balones, raquetas, canastas, etc. /juegos de construcciones / rompecabezas / pizarra. / pinturas, pinceles, acuarelas, estuches/ pupitres infantiles / plastilina y moldes/ libros para colorear y de pegatinas / plantillas de figuras para dibujar/ juguetes y muñecos para montar y desmontar/ casa de muñecas y muñecos pequeños que simulen acciones/teatros de marionetas y títeres/ accesorios para simular actividades domésticas: cocinitas y alimentos de plástico, plancha y tabla para planchar, caja registradora, juegos de tricotar/ garajes y cochecitos, coches de bomberos/trenes con vías/ juegos de organizar: pueblos, garajes, ciudades, granjas/caleidoscopio/ juegos de memoria visual/ dominó de colores y formas sencillas/juegos de mesa competitivos: parchís, oca, inicio en juegos de cartas/Juegos de habilidad como por ejemplo colocar objetos en el juguete sin que se caigan, meter piezas en ranuras con cuidado/cuerda para saltar/ construcciones de casas y castillos/ cocinitas y vajillas infantiles /mecano de piezas grandes. /vehículos en miniatura/ microscopio infantil /reloj de juguete/grabaciones de cuentos y canciones /ibros de historias cortas e ilustradas.
De 6 a 12 años
A partir de los seis años, y casi hasta los nueve, los niños tratan de demostrar su fuerza. Les gusta competir con sus iguales para averiguar su propio valor. Los juguetes utilizados para el ejercicio físico les ayudarán a liberar su tensión.
También son juguetes muy apropiados para esta edad aquéllos que favorezcan la habilidad, la atención y la capacidad creadora, la destreza y la imaginación y, sobre todo, la afirmación individual.
También les divierten los juegos con los demás (con terceras personas) en los que hay que cumplir unas reglas.
De seis a nueve años son casi imprescindibles la bicicleta, los
patines, las canicas, los aviones, las construcciones, el yo-yo, los juegos de letras, los telares, las costuras, los títeres y marionetas, las cajas para engarzar collares, los kits para el cuidado de la naturaleza (con casa incluida para pájaros), los solitarios, los juegos de mesa con preguntas y respuestas sobre distintas materias, los rompecabezas, loterías y todo aquello que se pueda coleccionar.
A partir de los nueve años y hasta los doce son muy importantes los juegos que anticipan situaciones adultas profesionales, como por ejemplo, los de química, electricidad o el microscopio. Resultan también muy positivos aquéllos que fomentan las actividades en equipo, sean deportivas o intelectuales.
Las construcciones, los mecanos a motor, las cometas, la iniciación en el modelismo (realizando aviones, barcos, casitas de muñecas y sus muebles en miniatura) y el coleccionismo de sellos, monedas, mariposas o rocas minerales, o los instrumentos musicales pueden ser el inicio de un “hobby” que dure toda la vida.
Más de 12 años
A esta edad comienza a desaparecer la necesidad de jugar. Es el momento de estimular las aficiones que se hayan ido adquiriendo a lo largo de la niñez o de investigar en distintas actividades que faciliten el ocio.
La principal tarea de esta etapa es la construcción de la propia identidad. Se trata de elaborar un proyecto vital en las distintas esferas de la vida adulta.
Es muy importante colaborar con los adolescentes en la consecución de estos objetivos, porque cuando no disponen de oportunidades positivas para establecer su identidad pueden resolver la tarea identificándose plenamente con ideologías o grupos de referencia negativos o absolutistas.
Todo aquello que fomente sus aficiones (los libros, la música, la ropa y los videojuegos) son los mejores regalos que se les puede hacer.

O MEU PRIMEIRO SUSPENSO

Un día calquera poden romperse os sonos de os pais respecto de os seus fillos. Isto é o que sucede cando o fillo trae o primeiro suspenso.
Pode que ata agora as notas escolares do fillo terían sido excelentes e de súpeto chega primeiro suspenso. Rómpese cunha costume, tal vez unha rutina positiva no comportamento do fillo, que os pais non rematan de entender e encaixar como é debido.

O máis probable é que ese primeiro suspenso poida estar causado por moi diversos motivos:
* porque o neno descoidouse na preparación desa materia;
* porque, sinxelamente,non se entende con a profesora;
* porque non tivo a sorte suficiente nas preguntas que lle fixeron na última avaliación;
* ou acaso porque esa materia non lle gusta, bloquéase cando se pon a estudala.
Outras veces o suspenso aparece no fillo no marco dun rendemento académico moito máis pobre. É, dende logo, o primeiro suspenso, pero…non o único nesta primeira avaliación. Ese suspenso vén trabado a outros, sexan estes moitos ou poucos, sen que os pais saiban a que aterse. O seu fillo, dende logo, é intelixente, simpático, dócil e parecía moi aplicado. Enténdese menos, por iso, o fatal resultado de esta primeira avaliación.De aquí que os pais decidan consultar cos profesores do seu fillo, por se tivese algún trastorno que explique ese desastre escolar, e así tratar de poñerlle remedio. Son pais que oíron falar de dislexia, atraso mental, trastornos da atención, hiperactividade,etc., e comezan a sospeitar se non estará aí a causa de que o seu fillo suspenda.
Noutros fillos, o primeiro suspenso aparece moito máis tarde. É o caso, por exemplo, do fillo maior que sempre obtivo moi boas notas e deu co seu modo de conducirse un bo exemplo aos seus irmáns: tamén nisto do estudo. Pero un día inesperado preséntase na casa co primeiro suspenso. Aos pais estráñalles moito este resultado, pero non acertan a entender -despois de preguntar o fillo unha e outra vez acerca do que pasou-, cal poida ser a súa causa. É posible que ese fillo tivese un conflito cos seus compañeiros, se namorase ou tal vez lle deixase a rapaza coa que saía.
Que é o que sucede na familia cando os fillos suspenden? Como responden os pais ante o suspenso dun fillo? As respostas e comportamentos a estes sucesos adoitan ser moi variadas e non todas elas se dirixen como debesen á solución do problema.
Cando os fillos suspenden, a familia polo xeral se alborota, entra en conflito e se enrarece. As reprensións, os “sermóns”, os castigos, os xestos desaboridos, as malas caras, as correccións en público sucédense como un torrente que se precipita sobre o fillo que suspendeu, que queda así anegado, culpabilizado e confundido. En realidade, o fillo suspendido non sabe como responder, dado que unha parte do seu corazón o fai notar que os seus pais teñen razón. Pero, ao mesmo tempo, dóese deses excesos aos que tal vez considera, por ser esaxerados, como inxustos.
A dor dos pais ante o primeiro suspenso dun fillo ten moito de obxectivo, certamente, pero tamén está cargado de moitas consideracións subxectivas, non sempre acertadas.
Se o suspenso acontece no fillo maior, os pais pensarán que, con toda urxencia, han de esforzarse en corrixilo, co fin de que os demais fillos non sigan o mal exemplo.
A imaxinación dos pais adoita magnificar a importancia do primeiro suspenso. Hai pais que o viven como unha deshonra ou unha desgracia familiar. O suspenso do fillo -así pensan algúns pais- arruína o prestixio da familia. Son pais que poden chegar a avergonzarse dos seus fillos, probablemente porque con anterioridade se adornaran coas cousas boas deles.
Nese caso, son pais que viven, a causa dese suspenso, unha gran traxedia. E proxectan no futuro unha mera anécdota curricular -que dende logo hai que tratar de corrixir-, da que non hai que sacar tan funestas consecuencias.
Un fillo non debería ser medido polos seus pais por só as cualificacións que obteña. Sen dúbida ningunha, as notas son algo importante, porque máis alá das súas limitacións, constitúen un indicador, relativamente obxectivo, de como vai ese fillo (se se esforza por traballar ou non, se é constante ou non no que se propón, se dispón de capacidade para vencerse a si mesmo, se tolera ou non as frustracións, etc.).Pero as cualificacións non son o único modo de manifestar o que o fillo é. As cualificacións non constitúen a mellor fotografía -e a máis completa- da persoa do fillo.Valorar o fillo unicamente polas notas que obtén é un tremendo erro. As notas escolares hai que tomalas polo que son e valen: un aspecto, sempre parcial, que manifesta certas peculiaridades do fillo, da vida dun fillo, por outra parte, en continua evolución. Facer das notas o único criterio para a cualificación do fillo constitúe un erro tan xigante coma se os fillos cualificasen os seus respectivos pais unicamente pola contía dos seus ingresos económicos.
Doutra parte, a familia non debe presentarse ante a comunidade como un todo único, cuxo prestixio resultante sexa a suma dos prestigios ou desprestixios académicos de cada unha das persoas que a integran. A familia non é unha “sociedade de bombos mutuos” e moito menos unha empresa cuxos valores -sobre todo os académicos, que son os máis difíciles de evadir e ocultar ante a mirada de curiosos e estraños- coticen na bolsa cultural.
Ante o primeiro suspenso o que os pais han de facer ante todo é non dramatizar, non apelar a “os sacrificios que fai o teu pai para que ti estudes”, non descualificar de forma absoluta o fillo e culpabilizar o en extremo. Cando se procede así, os pais equivócanse: tomaron a parte (o rendemento escolar ou académico) polo todo (a enteira persoa do seu fillo); contribuíron a que o fillo diminúa a súa autoestima e empobreza o seu nivel de aspiracións; e é probable que estean a condicionar no fillo a aparición dun concepto negativo de si mesmo (autoconcepto).
O postulado economicista e erróneo de “tanta vales canto tes” foi aquí substituído polo de “tanto vales canto valen as túas cualificacións” e, de momento, en nada máis. Este reducionismo no que se incorre non se compadece do fillo, nin lle fai xustiza, nin lle axuda a resolver.
O primeiro suspenso -estamos de acordo niso sería mellor que nunca se tivese producido. Pero unha vez que a súa aparición constitúe un feito irremediable, hai que tratar de sacar del o mellor partido posible. Son moitas as vantaxes que do primeiro suspenso poden derivarse tanto para o futuro profesional do fillo e a súa enteira persoa coma para a totalidade da familia e a sociedade.
O primeiro suspenso constitúe, que dúbida cabe, unha das primeiras e máis importantes situacións en que o fillo se encontra ante unha frustración persoal. Un suspenso non é outra cousa que a avaliación negativa acerca dunha aprendizaxe determinada sobre unha materia, cuantificada de forma numérica e convencional e, polo momento,nada máis.Este é o seu significado obxectivo. Pero sacar un suspenso é tamén moito máis que iso para o alumno que o obtén (significado subxectivo). Suspender é sinónimo de ser valorado de forma negativa na aprendizaxe realizada (criterio obxectivo), por cuxa virtude a mesma persoa queda cualificada en algo parcial -non na súa totalidade- de forma negativa (criterio subxectivo). Suspender unha materia é por iso en certo modo suspender parcialmente o propio Yo, ese Yo que cada persoa ama por enriba de calquera outra cousa.
Importa moito para o fillo que os pais o ensinen a afrontar esa experiencia frustrante. Para iso é moi conveniente que se individúen e illen ata chegar a identificar as causas por cales se produciu o suspenso. Este é o primeiro paso que hai que dar para a resolución do conflito En segundo lugar, é conveniente ensinalo o fillo a distinguir entre o suspenso na aprendizaxe desa materia e outras moitas cousas máis importantes que esa, que en nada han de cambiar por iso. Refírome, claro está, ao que o fillo vale por si mesmo, aos seus numerosos trazos positivos (xenerosidade, preocupación polos demais, espírito de sacrificio, amizade, etc.), e ao moito que os seus pais lle queren, con independencia do resultado escolar obtido.
A persoa é sempre moito máis que o que as súas accións e omisións valen. A persoa dispón sempre no seu haber de máis trazos positivos que negativos. Por iso constitúe un rudo erro pedagóxico magnificar os segundos e que se lle esquecen os primeiros. Grazas precisamente a eses variados e numerosos trazos positivos de que dispón é como o neno pode superarse a si mesmo, ao tratar de superar na seguinte avaliación ou convocatoria o actual suspenso. Un suspenso, dende esta perspectiva, é apenas un obstáculo, unha nova meta que se lle presenta, un reto que é preciso afrontar e alcanzar a resolver, co fin de crecer e madurar, é dicir, co fin de ser un mesmo, de sacar de si mesmo a mellor persoa posible.
Doutra parte, hai que entender o feito de que os pais se contraríen ante a chegada do suspenso. Pero sen xamais confundir esa contrariedade co afecto que experimentan polos seus fillos, afecto que en modo ningún han de ser alcanzados por este suceso. Sinxelamente, porque eses afectos son incondicionados e non poden estar subordinados ás cualificacións que obteñan os fillos.
Os pais poden servirse tamén do primeiro suspenso para crecer en tanto que pais. É posible que se tivesen estado máis atentos ás tarefas de aprendizaxe dese fillo, tal suspenso non se tivese producido.Como pais teñen deber de saber que é o que aprenden os seus fillos e que dificultades encontran nesas aprendizaxes. Non se trata tanto de que o pai substitúa o profesor na tarefa de ensinar o seu fillo, coma de que os pais se ocupen tamén -en lugar de só se preocupar- destes aspectos. Cada un ha de responder do cumprimento da súa misión.
Ao profesor corresponde o ensino desa materia, pero tamén o seguimento da aprendizaxe de cada alumno e tratar de motivar máis a quen máis necesidade teñen diso. Pero estas funcións dos profesores en modo ningún exclúen ou substitúen as que son propias dos pais.Os pais, en cambio, han de acompañar os seus fillos nas aprendizaxes que realizan; os pais han de compartir con eles os seus obstáculos e dificultades e axudalos a resolvelas na medida das súas posibilidades; os pais han de dar tamén exemplo aos seus fillos, estudando algunha que outra vez -en presenza dos fillos para mellorar así o desempeño das actividades profesionais en que se ocupan. Isto demostra que os pais non o saben todo, ao mesmo tempo que no fogar crea un clima favorable para o estudo. O ideal é que tamén os pais teñan que estudar de cando en vez, e que nisto sexan tamén un exemplo próximo e frecuente para os seus fillos.
En cambio, sería un erro supoñer que con cada exame que cada fillo realiza -e terán que realizar miles ao longo das súas vidas-, toda a familia se examina e resulta aprobada ou suspendida. Isto en absoluto é certo, por moito arraigamento social que tal práctica aínda teña nalgunhas familias. Doutra parte, é lóxico que na familia se note eses períodos de maior tensión xeneralizada, como consecuencia dos exames que realizan os fillos. Pero, enténdase ben, son os fillos e só eles os que se examinan.
Aos pais -nestes períodos en que ás veces se produce unha especial tensión- son outras as obrigas que lles corresponde. Así, por exemplo, a de descargar a atmosfera de traxedia que, con farta frecuencia, envolve a estas situacións; animalos a que conseguirán o resultado que se propoñen alcanzar, porque valen e están a traballar forte; evitarlles toda sensación de angustia, temor ou rexeitamento ante as probas que van realizar; afirmalos no que valen e confiar neles, ofrecéndolles a seguridade da que tanto necesitan nesas circunstancias; ter algún detalle nas comidas ou na sobremesa, que aos fillos lles guste e aprecien, de maneira que produza certo alivio na ansiedade flotante que invade o fogar.
Aínda que os fillos que suspenden teñan que abreviar as súas vacacións, a causa dos suspensos obtidos a familia na súa integridade non ha de castigarse a ela mesma e quedar sen vacacións. Ademais, en moitas situacións, non é conveniente que os fillos “queden sen vacacións”. Tamén é conveniente que eles descansen, aínda que máis brevemente sen teñen de emprender de novo a preparación dunha materia.
O ideal é axudalos a organizarse mellor, de maneira que descansen uns días e que -unha vez foron motivados para comezar a estudar outra vez- reemprendan os seus traballos. Ao que se aprecia, tamén os suspensos poden axudar a crecer a fillos e pais.
Trátase de non dramatizar o que apenas é unha anécdota, importante si, pero á fin unha mera anécdota, na vida de fillos e pais. Os suspensos son cousas dun instante; o crecemento e a madureza persoal asunto de toda a vida; a sabedoría dos pais como educadores unha cuestión para a eternidade.
CONSEJERÍA DE LA FAMILIA Y ASUNTOS SOCIALES DE LA COMUNIDAD DE MADRID
GUIAS DE LA FAMILIA EN MOMENTOS DIFÍCILES
AUTOR: DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA DE LA UNIVERSIDAD DE SAN PABLO
DIRIXIDO: CATEDRÁTICO DE PSICOPATOLOXÍA: AQUILINO POLAINO-LORENTE